Sheila, Gina y Laia son las tres profesoras que trabajan detrás de 3ways2teach, un blog que nace con absoluta vocación y que ofrece a los docentes infinidad de herramientas y recursos para usar en las aulas. O en esos “espacios para compartir experiencias”, porque es así como los define Sheila.
Dejaron de usar los libros de texto y se pusieron a investigar acerca de nuevas metodologías. Así fue como consiguieron desarrollar un buen número de ideas divertidas para padres y profesores para trabajar la lectoescriptura, el inglés o las emociones.
Hoy hablamos con las tres para conocer un poco más de cerca su proyecto y experiencia con los más pequeños.
Sois un equipo de tres en 3ways2teach. ¿Cómo surgió vuestro proyecto? ¿Qué podemos encontrar en 3ways2teach?
Como nuestro nombre indica, somos 3 profesoras. Cada una hemos trabajado en diferentes edades, en diferentes lenguas y hasta en distintos países, pero aunque las perspectivas cambien, tenemos una misma visión del niñ@.
Todo empezó cuando vimos que al trabajar de forma más manipulativa y a través del juego nos sobraban los libros. Veíamos que nuestr@s niñ@s se emocionaban aprendiendo de una forma diferente, pero muchas veces nos faltaban materiales y recursos en el aula.
Fue entonces cuando empezamos a investigar nuevas metodologías, para poder diseñar y crear materiales que se adaptaran a esta nueva forma de trabajar y que además no nos costasen un dineral.
Después de varios años de aplicarlos en el aula, decidimos crear una página web donde poder compartir las experiencias más significativas con compañer@s de todo el mundo.
En la página hay un blog con ideas divertidas para padres y profesores para trabajar la lectoescritura, el inglés, las mates, la ciencia, las emociones, el arte y más…
Y un espacio para compartir más de un centenar de materiales descargables en 3 idiomas: castellano, inglés y catalán, muchos de ellos gratuitos y otros a precio simbólico, para que todo el mundo tenga acceso.
También damos talleres y formaciones a profesores y estudiantes de magisterio, en varias universidades (Blanquerna, UAB, UIC), sobre cómo aplicar estos materiales y dar un giro a las clases convencionales. Es una de nuestras grandes ilusiones: poder compartir con otros profesores y ver cómo se apasionan transformando sus clases.
Actualmente contamos con más de 30 mil seguidores en redes sociales, y eso nos entusiasma, ya que para nosotras es muy alentador ver como tantas personas apuestan por un cambio educativo.
Sheila, eres maestra y psicopedagoga. Trabajas desde hace años en lo que más te gusta. ¿Cómo son tus clases?
La verdad es que más que clases son espacios donde compartir experiencias y guiar
intereses y donde no sólo aprenden ellos sino que lo hacemos juntos. Siempre intento que no falte el juego ya que es, sin duda, la mejor manera de aprender y también un espacio donde se puedan expresar las emociones y hablar de las cosas que más les gustan o interesan. He aprendido que empezar el día diciendo algo bonito a tus alumnos y dedicarles una sonrisa hace que todo vaya mejor.
Usas cuentos y poesías en el aula, entre otras muchas cosas. ¿Hace falta más magia en las aulas?
Sin duda, cuando la magia aparece, el interés se dispara. Los niños viven en un mundo fantástico donde todo es posible ¿Por qué no aprovecharnos de eso para aprender? Muchas veces no hacen falta grandes cosas, un poco de purpurina que te hace leer mejor, un muñeco que les trae cuentos o cosas curiosas que aparecen en cajas misteriosas siempre ayudan a que aprendan sin darse cuenta.
Gina, tu especialidad es el inglés. Creas tus propios recursos y trabajas con infinidad de soportes. ¿Cuáles son tus favoritos?
¡Uy, qué difícil! La verdad es que lo más me gusta son los recursos que me permiten interactuar con ell@s: teatros, canciones, juegos y bailes… todos son excusas para crear un ambiente de motivación y comunicación. Si tuviera que escoger, quizá serían los cuentos y sus personajes: cuando “visitan” la clase, ya sea en forma de títeres o muñecos, y proponen actividades o aprendizajes, l@s niñ@s pierden el miedo a equivocarse, intentan hablarles y hacerles preguntas y se involucran jugando y aprendiendo.
¿Qué opinas sobre la temprana incorporación del inglés como segundo o tercer idioma? ¿A partir de qué edad es conveniente empezar?
Para muchos es una pregunta controversial, pero yo creo en el potencial del niñ@. ¿Cuántas familias ya son plurilingües? La clave es hacer de la lengua algo vivo y relacional. El inglés, como toda lengua adicional, ha de servir para comunicar y conectar y no sólo para rellenar un test o lograr una nota. El año pasado tuvimos la oportunidad de hacer un intercambio de fotos, videos y proyectos con un colegio de USA y es que… ¡Tendrías que haber visto sus caras cuando intentaban hablarles! Si dejas entrar en tu clase el mundo real, los intereses de los niños y sus ideas, la motivación se dispara y sin darse cuenta ya están hablando en otro idioma.
Laia, maestra y soñadora. ¿La vocación se hereda? ¿Por qué crees que es fundamental tener «madera de docente»?
Creo que la vocación es algo inherente en cada persona, pero que se va desarrollando a lo largo de la vida. Sin embargo, también creo que si motivas a tus hijos hacia lo que para ti representa una pasión, la posibilidad de que sigan tus pasos siempre va a ser mayor. Yo me crié en un ambiente familiar donde se respiraba el amor por la educación, y aunque cuando crecí mi primera elección fue estudiar psicología, estoy convencida que fue esa pasión transmitida por mi madre, la que despertó años más tarde mi vocación por la docencia.
En mi opinión, la vocación por enseñar debería ser un requisito imprescindible para ser docente. No es lo mismo tener un profesor desganado y sin vocación, que uno apasionado, motivado y con ganas de enseñar y aprender cada día más. La actitud cuenta y es algo que sin darnos cuenta transmitimos a nuestros alumnos.
La creatividad y la curiosidad no están siempre presentes en las aulas. ¿Cómo podemos despertarlas en los más pequeños?
Los niños son curiosos y creativos por naturaleza. La curiosidad es un aspecto fundamental en esas edades, es el desencadenante y el motor del aprendizaje. Creo que como educadores es nuestro deber estimular esta curiosidad y ayudarles a descubrir el mundo. Debemos proporcionarles experiencias enriquecedoras y darles la oportunidad de trabajar con ideas innovadoras y originales. Despertar en ellos la ilusión por inventar y explorar, y fomentar su interés por la búsqueda y la originalidad.
Afortunadamente parece que se está produciendo un cambio profundo en el paradigma educativo. Una nueva educación está emergiendo y apostando por un aprendizaje vivencial, significativo y creativo. Profesores con una enorme vocación, motivados y preparados para dar a sus alumnos las herramientas necesarias para aprender a pensar.
Por último, nos gustaría que nos recomendarais tres actividades sencillas, pero que consideréis fundamentales para el desarrollo de los niños pequeños.
– Para nosotras son básicas las actividades de integración. Se trata de canciones, danzas y juegos que sirven para conocerse mejor, compartir información personal o simplemente reírse juntos. Esto hace que se conozcan mejor y se creen vínculos fuertes de amistad y colaboración, base para un futuro aprendizaje cooperativo.
Las hacemos durante todo el curso pero muy intensamente durante el primer trimestre y hemos comprobado que el sentimiento de grupo es mucho más fuerte y sano.
– Los juegos de todo tipo. El juego libre, de experimentación, de rol, de mesa. Desde jugar a inventar un supermercado, un restaurante o una oficina de pediatra, a tocar y experimentar con la luz, el color y el movimiento o utilizar un juego de cartas donde sin darse cuenta están usando vocabulario nuevo.
No es necesario reinventar la educación, hay que volver a las bases, y jugar es la principal ocupación de un niño; es donde aprende a socializar, a tomar riesgos, a encontrarse consigo mismo y el otro. En cierta ocasión una maestra de infantil me dijo que no tenía tiempo para jugar con sus alumnos, creemos que esto no puede ser. No hay aprendizaje sin emoción, y es a través del juego donde mejor se logra.
– También nos fascina cualquier actividad que implique experimentación sensorial, como por ejemplo las cajas y las botellas sensoriales. Sus infinitas posibilidades de juego y exploración nos permiten trabajar con los niños multisensorialmente y provocar el aprendizaje de una manera distinta. Y además de divertidas, son geniales para ayudarlos a relajarse, concentrarse y focalizar su atención durante el tiempo que dure la actividad.
Muchas gracias Sheila, Gina y Laia por dedicarnos vuestro tiempo y compartir vuestros conocimientos. ¡Ha sido un placer!